Un nuevo ámbito lacustre, distante a unos 180 kilómetros al sur de La Plata, sobre la Ruta 2, que va a terminar con una sequía de 139 años en esa parte del territorio bonaerense.
Castelli era una de las pocas ciudades cercanas al Río Salado que no tenía su laguna. Pero eso será cosa del pasado. En un año, a más tardar, tendrá como casi todos los pueblos que se ubican cerca del río Salado, su propio espejo.
Hace una década, “La Rosita” era un área de más de 200 hectáreas de humedales -barro y juncos- en las afueras del pueblo donde hoy viven unas 8 mil personas. La gestión municipal, abocada a atraer al turismo, comenzó entonces a trabajar para revitalizar ese espacio público. La primera etapa empezó en 2013: con máquinas municipales se dragó una parte de lo que hoy es el espejo de agua, se instaló un circuito aeróbico, gimnasio al aire libre, se restauró el calvario y se llevó electricidad para iluminar la zona, que rápidamente se pobló de vecinos que realizaban distintos deportes.
El intendente Francisco Echarren tenía, sin embargo, una idea todavía más ambiciosa: lograr que La Rosita sea un atractivo turístico que captara el cada vez más pujante público viajero de fin de semana, aprovechando que Castelli se encuentra dentro del radio de 200 kilómetros que delimita ese mercado.
Hoy en día, hasta la página de Wikipedia dedicada a la localidad bonaerense, advierte que la infraestructura hotelera es escasa. Echarren, entonces, planea que la laguna traiga inversiones y empleo, pero además que le garantice una salida apropiada y ágil para desagotar todo el sur del casco urbano ante lluvias copiosas como las que la azotaron en marzo de 2021. El intendente y Guillermo Jelinski, subsecretario de Recursos Hídricos de la provincia de Buenos Aires, firmaron el inicio de obra de dragado de la laguna. De esta manera se pondrá en marcha un proyecto mucho más ambicioso: se dragarán 27 hectáreas y se recuperarán otras 10 para usos recreativos. “Firmamos el inicio de una obra que fue un sueño durante 60 años. Es un hecho fundamental no solo como intendente sino como vecino”, expresó Echarren durante el acto.
Castelli es el primer municipio beneficiado con un programa de la Provincia de Buenos Aires que buscará recuperar otras lagunas, como la de Roque Pérez, Las Flores y 25 de Mayo. Son 180 millones de pesos que “se invertirán para retirar de manera mecánica y flotante juncos y basura del sector, mientras que paralelamente se comenzará con el retiro del suelo atarquinado”, según indicó la secretaría de Recursos Hídricos de la Provincia de Buenos Aires.
Conocida como uno de los principales atractivos turísticos de Castelli, La Rosita está ubicada a unos 2 kilómetros del centro de la ciudad y el recorrido hasta su costanera se puede realizar por caminos pavimentados. Cuenta con seguridad en los accesos, controles las 24 horas e iluminación en el boulevard que la rodea. Dentro del predio, sobre la margen oeste, se encuentra el recreo municipal, que cuenta con instalaciones sanitarias y de baño, espacio para acampar con mesas y parrillas, y una gran cantidad de árboles que brindan sombra y resguardo. Sobre sus orillas se asienta el Club de Náutica y Pesca local, que se encarga del mantenimiento. Presenta costas barrosas con suaves declives, a menudo pobladas de juncos, y una gran variedad de aves acuáticas.