Patrimonio de la ciudad desde hace más de cuatro décadas

Se trata de un Bösendorfer Gran Imperial de cola, realizado de manera artesanal por un taller austíaco. La encargada de llevar adelante esta tarea es Natalia Minuchín, restauradora del Museo de Arte Juan Carlos Castagnino.

El Municipio -a través de la Secretaría de Cultura- está llevando a cabo la restauración de la capa pictórica del piano del Teatro Municipal Colón. Se trata de un Bösendorfer Gran Imperial de cola, realizado de manera artesanal por el taller austríaco y que forma parte del patrimonio de la ciudad desde hace más de 40 años.

Natalia Minuchín, restauradora del Museo Municipal de Arte Juan Carlos Castagnino, es la encargada de desarrollar la tarea que consiste en la reconstrucción de la superficie que -según detalla- “se encuentra en buen estado, pero tiene algunas pérdidas, y es por eso que las estamos consolidando y vamos a hacer una restauración pictórica”.

Estos trabajos forman de una serie de acciones que viene desarrollando, más allá de las tareas que realiza en el Museo con la conservación y restauración de las obras que son propiedad y patrimonio de ese espacio cultural. Es que desde hace un tiempo se encuentra colaborando en diferentes acciones en el Teatro Colón, que empezó con la reposición y reconstrucción de las mayólicas del hall de entrada, continuó con la restauración de taburete del piano y ahora con la superficie del emblemático instrumento musical que corresponde a la Orquesta Sinfónica Municipal y que usaron destacados solistas como Horacio Lavandera, Bruno Gelber e Ivan Rutkauskas, entre otros.

“Es importante consolidar y recuperar la placa pictórica del piano para que no siga habiendo más pérdidas y se pueda conservar en el tiempo en el estado original. Por eso estamos solamente interviniendo sobre aquellos puntos faltantes de la capa, vamos a reintegrar esas partes y luego las vamos a proteger”, agregó la restauradora.

En rigor, se trata de un meticuloso trabajo para el que se aplica un estuco de cola de conejo y carbonato de calcio, que luego se nivela con el original “para integrar las partes blancas y después se protegen con goma laca, realizada también de manera artesanal. Se van aplicando varias capas hasta alcanzar el brillo que tiene el piano en su totalidad”, detalló Minuchín.

Estas acciones forman parte de la iniciativa de la cartera cultural de preservar y proteger el patrimonio de la ciudad y que tiene un importante valor, no sólo en lo económico, sino especialmente como piezas artísticas que son parte del acervo y la riqueza cultural de la comunidad marplatense y batanense.